El niño de cuatro años que recibió un disparo de escopeta en un establecimiento avícola de la zona de Seguí, se encuentra internado en el Hospital San Roque de Paraná, en estado “delicado”. De acuerdo a lo informado por el jefe de la departamental Paraná, Ricardo Frank, el niño de apellido Brikman, fue intervenido quirúrgicamente en el hospital San Roque de Paraná, en “una operación que llevó más de cinco horas”.

“Se trata de una familia de apellido Brikman, que se domicilia en la zona rural de la localidad de Seguí, sobre ruta 5, donde tienen un criadero de pollos”, relató a Elonce TV.


 


A su vez, mencionó que “por causas que estamos investigando, el niño recibió los perdigones de la escopeta, de gran calibre, los que lo lesionaron en su zona intestinal”.


 


El pequeño fue intervenido quirúrgicamente, “llevando más de cinco horas la operación”.


 


“Por los dichos recabados el suceso habría sido accidental; a causa de algunos animales que le ocasionan inconvenientes en el criadero, él (el padre de familia) habría efectuado el disparo y no habría observado la presencia de su mujer y su hijo y se habría desencadenado el hecho”, explicó. No obstante, dejó en claro que “estamos analizando el hecho, se realizó el secuestro del arma de fuego en el lugar, y ya con la presencia de personal de Criminalística, y los equipos técnicos, trabajamos para dejar establecidas las causas del hecho”.


 


Las horas siguientes a la intervención quirúrgicas serán determinantes en la evolución del niño. Elonce.com.