Sarah Barzola en junio de 2016 le diagnosticaron un tumor en el mediastino. Tenía sólo 11 meses de vida y, junto a sus papás, Víctor Barzola y Adriana Varón, se internó en el hospital de niños “Doctor Ricardo Gutiérrez” de Buenos Aires. Sus hermanas, las mellis Lucía y Victoria, abuelos, tíos y la comunidad de Cerrito, de donde es oriunda la familia, acompañaron a la distancia el proceso de curación. El sábado, tras recibir el alta médica, la pequeña de un año y siete meses, fue recibida en su pueblo natal con una caravana festiva. Globos, bocinazos, carteles de bienvenida y el aplauso de sus vecinos, que la calificaron como “una guerrera”.

Luego de esta gran noticia, su papá, Víctor Barzola, contó los momentos de angustia, de incertidumbre y de lucha que debieron atravesar durante siete meses. “Sarah sufrió un paro cardiorespiratorio en junio. Desde el hospital de Cerrito la derivaron al San Roque, en Paraná, y desde allí directamente al hospital Gutiérrez, en Buenos Aires. Le diagnosticaron un tumor en el mediastino (es la parte del tórax entre el esternón y la columna vertebral que contiene el esófago, la tráquea, el corazón y otras estructuras importantes)”, explicó.

“A Sarah le hicieron un tratamiento de quimioterapia y, una vez cumplido un determinado período, se la sometió a una cirugía para extraerle el tumor. Ya en ese momento los cirujanos que realizaron la operación les indicaron a sus papás que había sido exitosa. Aun así, los meses de incertidumbre continuaron hasta el viernes pasado, cuando un análisis de orina comprobó que la pequeña Sarah estaba sana. Ahora quedan los controles mensuales, pero no debe tomar ningún medicamento y puede hacer una vida normal.

“Lo que uno siente cuando se entera que un hijo está enfermo y lo que nos pasa a lo largo del tratamiento es algo indescriptible. Es muy difícil, porque se dan días buenos, días malos. El acompañamiento de nuestro pueblo fue un pilar fundamental para nosotros. Se hicieron bicicleteadas, peñas, cadenas de oración de todos los credos. Gente conocida y no tanto, se comunicaban con nosotros para preguntarnos cómo estaba la beba, para darnos fuerzas, para apuntalarnos. No tenemos más que palabras de agradecimiento”, indicó.

Víctor y Adriana estuvieron en Buenos Aires los siete meses que duró el tratamiento. Ambos son docentes y tienen tres hijas. Sarah y las mellizas Lucía y Victoria, de 14 años, que se quedaron en Cerrito, al cuidado de tíos y abuelos.

Tumor en el mediastino

Los tumores mediastinales son masas o neoplasias que se forman en el mediastino, una zona en la mitad del tórax que separa los pulmones.

El mediastino es la parte del tórax que está entre el esternón y la columna vertebral, y entre los pulmones. Esta zona contiene el corazón, los vasos sanguíneos grandes, la tráquea, el timo, el esófago y tejidos conectivos. El mediastino se divide en 3 secciones: Anterior (frontal), Media, Posterior (atrás).

Los tumores del mediastino son poco frecuentes

La ubicación común para los tumores del mediastino depende de la edad de la persona. En los niños, dichos tumores son más comunes en el mediastino posterior. Estos tumores con frecuencia comienzan en los nervios y no son cancerosos (benignos). 

La mayoría de estos tumores en los adultos ocurre en el mediastino anterior. Generalmente son linfomas, tumores de las células germinativas o timomas cancerosos (malignos). Estos tumores son más frecuentes en personas de mediana edad o adultos mayores.

Fuente: UNO.